Cómo nace el Proyecto Base
Nací en una familia donde la espiritualidad es un aspecto importante a considerar, a la hora de hablar de crecimiento personal. Desde niña se me explicó que el ser humano, además de su cuerpo físico, poseía un alma, que juega un rol importante en el bienestar de la persona. También crecí bajo la convicción de que nuestros pensamientos tienen fuerte influencia en nuestras vidas; solía escuchar muy seguido “hay que saber pensar, estar seguro de que las cosas saldrán bien, sólo así uno está siempre sano y los problemas se solucionan rápidamente”, me lo repitió, desde que tengo uso de razón, la persona más sabia de mi familia, a quien debo mucho mi apertura hacia lo espiritual, mi querida abuela materna Elsa. En este contexto, para mí fue evidente pensar que cuando existe enfermedad en un individuo, no sólo podían existir causas físicas, por un mal funcionamiento del organismo, sino que también pueden haber causas provenientes de ámbitos inmateriales.
En relación a los medios de curación, mi familia siempre dio la importancia que creemos merece la medicina alópata, reconociendo en ella su historia y evolución científica, necesaria de aplicar en ciertas patologías y síntomas. Pero también, desde niña, tuve contacto con tratamientos de salud no tradicionales, pues conocí muy tempranamente los beneficios de ciertas infusiones de hierbas, de la homeopatía, de acupuntura, naturopatía, entre algunos.
Así crecí y fui reafirmando, a lo largo del tiempo, mi visión holística de ser humano, y a medida que estudié y luego ejercí mi primera profesión, Ingeniería Comercial. En forma paralela, comencé a conocer y formarme en ciertas técnicas y/o métodos de sanación tales como la técnica de la energía universal, reiki y flores de Bach, que en ese entonces no se conocían mucho, e incluso si se sabía algo, en muchas situaciones eran mal entendidas, cosa que aún ocurre en la actualidad. Todos estos estudios, no hicieron más que confirmar lo que siempre supe, y hacerme pensar en la necesidad de integración de técnicas y disciplinas a la hora de pretender sanar a una persona. Nacieron entonces, en mi mente proyectos, relacionados con la salud complementaria, que esperaban concretarse en el futuro, tal vez no tan cercano.
Pasó el tiempo, y el destino hizo que, luego del nacimiento de mi hijo, tomara la decisión de estudiar una segunda carrera, Psicología, alternativa que siempre me interesó dentro de la gama de profesiones. Luego, mis seis años de estudio no hicieron más que agregar valor a mi forma de ver la vida, no sólo me han ayudado a mejorar mi vida personal, sino también a comprender, de mejor manera, a las personas en su actuar. Durante estos últimos estudios, me di cuenta con alegría que mis conocimientos referentes a las técnicas de sanación, antes nombradas y otras más, se podían complementar perfectamente con la práctica profesional, ya que se enmarcan dentro de la línea de la psicología transpersonal. Esta nueva situación, hace que mi proyecto de antaño, respecto a la salud complementaria, comience a tomar nueva forma, pues ahora se veía más cercano a la realidad, sí, desde mi rol de psicóloga.
Debo señalar, que soy una agradecida de lo que la vida me ha brindado, pues mi familia y mis estudios de técnicas energéticas y complementarias de salud, han hecho que conozca y vivencie el lado espiritual del ser; la ingeniería reforzó el concepto de materialismo, lógica y utilitarismo, que forman parte del hombre; y la psicología, no sólo me ha ayudado a madurar en los diferentes ámbitos de mi vida, sino también a comprender el comportamiento humano, llegando a integrar, de manera más flexible, todas las áreas que forman parte de éste.
En el año 2005, surge mi absoluto deseo de ejercer la psicología bajo esa mirada integrativa de ser humano, y en el año 2007 comienzo a visualizar la forma de contribuir al bienestar de las personas, a través de mi formación profesional, y de otras técnicas y/o disciplinas; es cuando me propuse planificar la manera de concretizar, lo antes posible mi sueño.
Patricia E. Núñez Díaz
Psicóloga Clínica Rut 10.761.613-6
Terapeuta Floral Reg. N° 619